Tristeza invade poco a poco mis sentidos,
No creo ser tan especial,
No te llamará el dolor de mis latidos.
Efluvios de euforia atemporal y atípica,
Sabor a madera y barrica,
Un dolor que nadie más diagnostica,
Tu recuerdo aún te califica...
Caos y emociones difusas sin nada que sentir,
Un dolor que carcome la corteza,
Ansias de estar y a la vez huir
A un lugar en mi cabeza.
Los sueños son efluvios de felicidad efímera,
Quimeras esquivas de utopía,
Un lugar tan lejano y tan alto, a traves de la escalera,
Donde aún late tu filosofía...
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