Algo de placer que viene pálido y demacrado.
Mientras el hielo quemaba los bosques,
y la ventisca airosa se colaba entre tus ropas.
Regalándote golpes muy fuertes,mientras la sangre llenaba las copas
He sentido a la serpiente, enroscarse con furia creciente.
Tratando de robarme la vida, haciendo de mí su comida.
Los golpes que he recibido,han dejado un rostro demacrado,
Inundado de marcas y de cardenales,que pronto en la tristeza me han abandonado
Sintiendo el veneno escurriendo de las paredes,
Reptando por ser el que me destroce, me llene las entrañas de horrendas alimañas,
Y tratar de que así sea como goce.
Disfruatar de este sufrimiento,que del inframundo es sustento
Al que llaman con recelo, y por el que pasan desvelos
¡Venga pues todo el dolor!
¡Venga tu puño cerrado!
¡Aquí esta el vencedor!
¡Que aún no se ha abandonado!
¡Que el veneno inunde mis entrañas!
¡Que de tu cuerpo la sangre emane!
¡Que tu fin sean tus propias artimañas!
!Mientras la vida sea yo quien te la gane!
David Vega
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