martes, 12 de abril de 2011

Caja de mentiras


















¿Y que soy yo si no una caja de mentiras?


Año, tras año viviendo en la prisión que yo mismo me forjé

Cuantos adjetivos han pasado por mi persona

Cuantas cosas me arrollaron hasta dejarme marcado

¿Qué soy, o más bien en que me convertí?

Cuantas cosas han pasado por mí

No sé si soy

Un devoto católico,

Un trabajador incansable,

Un alumno excelente,

Un compañero perfecto,

Un participante activo,

Un hijo modelo,

Un ejemplo a seguir,

Un depredador sexual,

Un objeto al que observar,

Un depósito de drogas,

Una cisterna de alcohol,

Un almacén de nicotina,

Un trabajado responsable,

El más puntual,

El más honesto,

El más pulcro,

El más ingenuo,

Un receptáculo de caricias,

Un niño atemorizado,

Un niño golpeado,

Un niño marcado,

El objeto de las burlas,

El más tonto a quién acudir,

El que da todo sin pensarlo,

El que se ha superado,

El que ha logrado todo,

El que no está a gusto,

El escritor frustrado,

El irreverente,

El que busca llamar la atención,

El que necesita un abrazo,

El pintor,

El escultor,

No lo sé, no lo sé,

¿Qué soy yo?

Soy aquel que viste con ropajes negros

Aquel que miraste con el cabello en mil colores

Al que miraste tirado de borracho en la calle

El que olvidó lo que hizo en una noche de drogas

El que pasó por las caricias de mundo y medio

El que sirvió para obtener beneficios,

El que gritaba desesperado por ayuda

El que lastimó a los que más lo amaban

Aquel que la policía detuvo por su actuación deplorable

Aquel que defendió a las prostitutas

Aquel que lo dejó todo por seguir en una fiesta

Aquel que no tuvo amigos

El que viste destrozarse los brazos con navaja

Ese soy yo

Aquel que le mintió a todos

Aquel que escondió lo que sentía

Aquel que logró lo que nadie quiere

Soy la sombra que ves llorar por las noches

Aquel que lleva el alma desgarrada

El que vez aullándole a la luna cada noche

Que se acabe este tormento infinito

Que la sombra del incesto no lo persiga

Que desea estar sordo para no escuchar las burlas

Que necesita con desesperación un consuelo

Ahora ya no se que soy…

Ahora ya no sé si todo lo que he hecho va a tener algún perdón

Si cada destrozo que hice no me perseguirá en mi consciencia

Soy un simple humano

Un molde vacío

El que no aceptó su destino

El que se reveló ante todo

El que no quiso carencias

El que no quiso burlas

El que no escucha reproches

El que no soporta una caricia

Perdón… perdón… perdón…

Sólo soy una maldita caja de mentiras…

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